La madre, separada, se ocupa en las tareas del hogar mientras se lamenta por algunas decisiones pasadas que hoy percibe como puertas a su frustración.
La hija mayor ya no es una niña, está empezando a tener relaciones con chicos, ha decidido preocuparse sólo por sí misma, puede que se esté haciendo fuerte.
La hermana pequeña, de apenas diez años, mantiene oculto en su habitación a un alienígena del que espera explicaciones, alguna respuesta, tal vez un libro de instrucciones para manejarse en este mundo raro. ¿En qué consistirá ser mujer?
Este libro nos mece en una narración diáfana, poética y de corazón, donde se demuestra que el gesto más insignificante puede llegar a ser decisivo.