Bienvenido al mundo de Pepito, donde la imaginación y realidad se unen en el sendero de los sueños de un niño. Allí es posible que encuentres hadas buenas que viven en países diminutos. Se dice que conceden deseos. ¿Quieres pedir uno? ¿Que cómo? No tienes por qué preocuparte: la autora te lo cuenta a lo largo de las páginas del libro. Por cierto, ¿quién pediría ese deseo tan raro? Me pareció ver un barco pirata navegando por el jardín, con una bandera negra y una calavera. Creo que llevaba a un gato como tripulante. ¿Lo pediría nuestro protagonista? ¿Qué pensáis? Al igual que Geppetto creó a Pinocho con un trozo de madera y sus herramientas de carpintero, la autora crea a su personaje principal con las herramientas que mejor sabe utilizar y que siempre tiene a mano: un bolígrafo y su cuaderno de notas. También a su familia y a su inseparable gato Rufo, sin olvidase de su amiga Leticia, con la que piensa casarse cuando sea mayor y de Juan, su mejor amigo, a pesar de ser tipo raro. ¿Os animáis a conocer sus historias?