¿Hemos construido un país de solucionólogos y comentócratas? ¿Por qué la violencia y la humillación parecen inherentes a nuestra historia? Pensar México es una verdadera radiografía cultural de nuestro país.
En Pensar Medio Oriente, Maruan Soto Antaki plantea preguntas esenciales para entender el mundo árabe(¿arabe es sinónimo de islámico? ¿Es indisociable el Islam del terrorismo? ¿Qué tan profundas son las raíces de los conflictos?)
Ahora, centra su atención en un ámbito más cercano: México. Para entender Medio Oriente, debíamos dirigir nuestra mirada al lenguaje, pues ahí está el corazón de la cultura árabe. En el caso de México, hay que hacer lo mismo.
La forma como hablamos y como callamos los mexicanos dice mucho de quiénes somos. Soto Antaki cuestiona la difundida idea de que, en México, el significado de las palabras varía dependiendo del contexto (según esto, podríamos insultar con afecto o sin tener la intención de agredir). Esto no es así: el problema es que, al relativizar el lenguaje al grado en el que lo hemos hecho, hemos vaciado a las palabras de significado. Ley, corrupción, orden: son palabras que pueden querer decir todo y nada.
Esta erosión de significado revela un problema realmente grave, dado que el lenguaje es el principal elemento civilizatorio y que las élites culturales de nuestro país parecen haber renunciado a construir discursos públicos, ya sólo se hablan a sí mismas.