Argumento de Pensar Històricament
A partir de una reflexión colectiva, en esta obra se tratan aspectos decisivos sobre la necesidad de rigor del análisis histórico y las implicaciones cívicas de la tarea del historiador. El vínculo innegable entre el trabajo histórico y el poder se aborda des de una doble perspectiva, la del historiador que quiere transformarlo a través de su discurso, y la de los políticos que buscan en el discurso histórico una razón para sus interpretaciones. Así, las diversas intervenciones remarcan que el historiador no debe rehuir el compromiso cívico con los desfavorecidos de la sociedad y con una democracia todavía en construcción. Pero sin obviar la demanda de «memoria histórica» de la sociedad contemporánea, hace falta diferenciar entre memoria e historia, entendida esta como un análisis de las razones de los procesos de cambio sometida a las exigencias metodológicas.1