Opción Cero fue como se dio a conocer la drástica coyuntura de pobreza energética a la que hubo de hacer frente Cuba en los años noventa, cuando tras la caída de la Unión Soviética se vio desprovista de sus suministros externos, especialmente de petróleo. En un contexto de aislamiento internacional y de autarquía económica, Cuba llevó a cabo una reconversión energética y agroecológica sin precedentes en la historia de un país industrial. Frente a sus detractores, algunos analistas internacionales y movimientos ecologistas han querido ver en la Opción Cero un caso pionero de adaptación de una sociedad industrial ante una crisis energética extrema. El caso cubano representaría así una suerte de observatorio gracias al cual se podrían estudiar con valor anticipatorio los efectos del declive energético del siglo XXI y las crisis socioecológicas, y la viabilidad de sus respuestas, sobre todo en el ámbito de la agroecología. Este libro centra su interpretación en la sostenibilidad ecológica de la Cuba postsoviética y analiza la hipótesis de la Cuba Verde. ¿Fue una adaptación coyuntural, en un contexto de transición forzosa, o de un cambio radical de paradigma? ¿Es la sociedad cubana una sociedad en transición hacia la sostenibilidad? ¿Qué relación existe entre los logros agroecológicos y la sociedad en su conjunto? ¿Su caso es extrapolable a otros contextos sociales e históricos? Estas son algunas de las preguntas en las que ahonda esta obra, acaso también para mostrar que en la experiencia cubana sus fracasos son casi más importantes que sus aciertos.