Hace diez años lo secuestraron. No sabe quién. Durante todo este tiempo ha estado encerrado en una prisión privada. No sabe por qué. Sus únicos contactos con el mundo exterior han sido un televisor y la voz de sus carceleros. Ha perdido la razón. Se ha transformado en alguien diferente. Alguien letal.
Un día despierta y se encuentra al aire libre. Ha llegado la hora de reclamar una terrible venganza.