Kezia Trevellyn estaba completamente enamorada de su guapísimo jefe, el empresario griego Nikos Niarchou. Pero jamás podría haber nada entre ellos porque, para Nikos, Kezia no era más que una eficiente y agradable secretaria.En un crucero de lujo al que tuvo que acompañarlo, los sueños de Kezia se hicieron realidad. Durante aquellas apasionadas noches del Mediterráneo, Kezia casi llegó a olvidar el único motivo por el que aquella relación jamás podría durar? fue entonces cuando Nikos le pidió que se casara con él.