Luca no se siente orgulloso de ciertas cosas que hizo siendo un joven y alocado estudiante. Trata de apartarlas de su mente pero tienen rostro, un rostro aniñado y precioso que lo mira suplicante desde sus ojos enormes. Ella es un tatuaje vivo en muchas zonas de su piel y él no podrá librarse de su recuerdo aunque quiera. Esa noche en que se reencuentran, supone el principio de una demencial aventura en la que alguien podría resultar herido.
¿Es cierto que el amor todo lo puede?