Los campos de batalla de Badajoz no eran nada comparados con las lenguas viperinas de la alta sociedad, pero Jack Vernon nunca había sido muy sociable. La compañía preferida de un pintor es su lienzo. Y su arte, que fue en otro tiempo el modo de expresar el horror que presenció en la guerra, era ahora su medio de hacer fortuna. Su mejor encargo sería el retrato de la hermosa actriz Ariana Blane. Y estudiar cada curva de su cuerpo iba a despertar en él sentimientos que creía destruidos para siempre. Pero él no era el único que había puesto sus miras en Ariana?