Argumento de Mosaico de Sombras, el
Constantinopla, 1096. El mayor imperio de la cristiandad corre el riesgo de ser destruido cuando una mano misteriosa dispara una flecha dirigida al corazón del emperador Alejo. La flecha yerra el blanco, pero la alarma se extiende por todo el palacio: si Alejo cae, Bizancio entera será destruida. Demetrio Askiates, «desvelador de misterios», antiguo legionario y cazador de recompensas al servicio del imperio, es rápidamente requerido para atrapar al criminal e impedir que éste alcance su funesto objetivo. El veterano detective, curtido en los bajos fondos, deberá adentrarse en un mundo desconocido: un hervidero de príncipes, esclavos, eunucos y mercaderes, donde se verá desafiado a desenredar una nebulosa trama de intrigas. Desde los barrios más recónditos hasta las torres doradas del palacio imperial, desde las arenas del hipódromo hasta las cúpulas sublimes de Hagia Sofía, Demetrio deberá abrirse camino a lo largo de un peligroso laberinto de traiciones y engaños, antes de que el tiempo se agote y las calles de la ciudad se tiñan de sangre.1