El inspector Paul Hjelm se enfrenta a un proceso de disciplina interno por disparar a un extranjero durante un secuestro con rehenes. Su impulsiva actuación no ha sido entendida y, a pesar de que le ha convertido en un héroe mediático, ha desbaratado su carrera. De pronto, una singular propuesta del superintendente Jan-Olov Hultin le sacará de la pesadilla: unirse a un grupo de investigadores de élite a los que denomina Grupo A.