Se trata de la reforma de la capilla de San Pedro (o del Santísimo), situada en el ábside lateral derecho de la cabecera del templo gótico. Consiste en un mural cerámico policromado de 300 metros cuadrados que representa el milagro de la multiplicación de los panes y los peces según el Evangelio de San Juan. Barceló produjo el mural cerámico en Vietri sul Mare (Nápoles) en colaboración con el ceramista Vincenzo Santoriello. También incluye cinco vitrales de doce metros de altura, fabricados en Tolosa de Languedoc en el taller de Jean-Dominique Fleury, y el mobiliario litúrgico complementario creado con piedra de Binissalem.
La iniciativa, impulsada por la Fundació Art en la Seu, fue inaugurada el 2 de febrero de 2007 con una ceremonia oficiada por el obispo de Mallorca, Jesús Murgui, y presidida por los reyes de España.