Sybylla Melvin es una heroína que «con su conmovedor encanto, su carácter impetuoso, su falta de decoro, está al nivel de las grandes figuras románticas del siglo XIX» ( The Times ).
Desde que su familia decide trasladarse a una granja y cae abrupta pero irremisiblemente en la ruina, su destino parece condenado al duro trabajo y a «una vida estéril y monótona», una perspectiva durísima para una muchacha con su «temperamento» y sus «aspiraciones». Una temporada en la gran mansión de su abuela, donde el ambiente es musical y leído y donde la corteja un joven y apuesto terrateniente, es para ella un oasis en el desierto. Pero un nuevo revés la obliga a aceptar un puesto como institutriz en casa de una familia insensible y con unos niños salvajes. Para ella, la naturaleza y la cultura no se oponen? pero no tarda en descubrir que, en el mundo que asiste a su formación, nunca dejará de ser un bicho raro.
Miles Franklin escribió Mi impresionante carrera (1901) en su adolescencia y la publicó a los veintidós años: desde entonces esta novela audaz, poética y sensual, una apología radical de la independencia donde todo es memorable, es un clásico de las letras australianas.