Argumento de Me Veo luego Existo : Mujeres que Representan, Mujeres Representadas
Estudiar la relación entre mujer y arte supone un doble reto: para quienes la protagonizan, implica traspasar la barrera entre objeto y sujeto de la obra artística; para quienes la investigan, conlleva indagar en los resquicios de un discurso eminentemente patriarcal. Por fortuna, cada vez se profundiza más en este campo y, sin embargo, sigue siendo preciso elaborar un mapa de la historia que, hasta ahora había sido trazado asumiendo como cierta la tradición historiográfica.
Este libro surge con el objetivo de ofrecer una historia de la conquista de la imagen por parte de la mujer, un proceso no carente de retrocesos y estancamientos, pero también de situaciones coincidentes y estrategias convergentes. Será precisamente en estas confluencias donde hallemos cuestiones constantes a lo largo de la historia: ¿por qué existe una mirada asimétrica?, ¿cómo pasar de objeto a sujeto de la imagen?, ¿cómo construir la propia voz en un contexto patriarcal?
Para dar respuesta a estas preguntas se plantean diferentes perspectivas y metodologías que afrontan dos principales líneas de trabajo: por un lado, la imagen de la mujer fabricada por la mirada masculina, estructurada a través del mito y cuyo fin es perpetuar un orden patriarcal; por otro, el significado cultural del trabajo de las artistas, un trabajo que a menudo implica afrontar los condicionantes sociales de cada época y que, sobre todo, debe superar la mirada dominante.1