¿Existe la posibilidad de ser moderna cuando tu hija adolescente sabe más posturas sexuales que tú? ¿Es posible tener orgasmos con un marido que está la mitad del tiempo en el paro y la otra mitad en el fútbol? ¿Hay manera de entrar en la vejez cuando tu suegro de 80 años cae preso por tenencia ilícita de marihuana? ¿Se puede dormir en paz cuando tu primogénito es gay, después no, después sí, y la culpa siempre es tuya? Éstas son algunas de las cavilaciones de Lola, madre de una disparatada familia y protagonista de Más respeto, que soy tu madre , una novela tierna y desternillante basada en el weblog «Diario de una mujer gorda», considerado como el mejor del mundo en 2005. Ahora llega al papel con la misma fuerza con que recorrió el mundo virtual.