Argumento de Manual de la Biblia
Este manual de la Biblia quiere ser una ayuda para la comprensión del libro sagrado. Dos son los puntos de vista que han guiado al autor en la selección del material: ante todo, el empeño por ofrecer informaciones y representaciones claras del entorno histórico, geográfico y cultural de la Biblia, a fin de hacer más transparentes los mismos textos bíblicos; y, en segundo lugar, dar aquellas referencias básicas que sirven para señalizar o al menos facilitar la comprensión interna de la doctrina bíblica. Tal vez este segundo aspecto vaya más lejos de lo que cabría esperar de un libro así, pero no debemos olvidar que la comprensión actual del sentido de los textos de la Biblia es lo que en definitiva interesa a los lectores a quienes va dirigido este estudio. En concreto, esta obra nos ofrece los puntos que siguen.
Introducción a la Biblia. Una vez consignados los libros que forman el Antiguo y el Nuevo Testamento, se especifican los rasgos típicos de la visión judía y de la cristiana con respecto a la Biblia, se discute el sentido que tiene la inspiración y se trazan las grandes líneas de la formación del canon. El lector se enterará también de algunas de las curiosas supersticiones que se han desarrollado en el mundo cristiano germánico, en este caso al calor de la fe en la palabra de Dios contenida en la Biblia.
Referencias lingüísticas. Hoy sabemos que cada lengua es un mundo. Por eso no es extraño que la Biblia, que fue escrita en lenguas profundamente diferentes y distantes -y no sólo en el tiempo- de las de la mayoría de sus lectores actuales, resulte difícil de comprender. Además de los datos sobre las lenguas bíblicas, se nos informa sobre las principales maneras de expresarse -géneros o formas literarias- de los autores de la Biblia.
Libros y perícopas del Antiguo y Nuevo Testamento. Ocupan la parte central de la obra; además de una introducción general a cada escrito bíblico, se recorren y analizan brevemente, por el orden que tienen en la Biblia, los principales pasajes, o al menos aquellos que ofrecen mayor dificultad de comprensión.
Exposiciones históricas. La historia de Israel forma parte de la historia del Oriente próximo durante unos siglos de especial densidad histórica. Tener claros los perfiles de los pueblos que intervienen y conocer los datos esenciales de los imperios que se suceden hará que la propia historia bíblica aparezca bajo una luz más realista.
Aclaraciones culturales. El mundo de la Biblia es en gran parte algo periclitado, y en cualquier caso resulta un entorno cultural difícilmente representable. La manera de pensar y la forma de vivir eran distintas de las nuestras. Aquí es donde, sin duda, le espera al lector creyente actual la tarea más ardua: cómo tener la libertad para saber prescindir de ese mundo del pasado y, al mismo tiempo, actuar con la responsabilidad de quien escucha atentamente la palabra viva de Dios.
El contexto religioso de la Biblia. Los dioses y las prácticas religiosas de los pueblos vecinos, la evolución religiosa de Israel, las instituciones, los usos más importantes...
Marco geográfico. Naciones, ciudades principales.
En una palabra, el autor pretende ofrecer a sus lectores lo esencial de aquella información que hoy se le ofrece dispersa en diccionarios, monografías y obras especializadas, con frecuencia de difícil acceso o que exigen mucho tiempo de consulta. Más concretamente, Editorial Herder espera que este manual preste especiales servicios a quienes trabajan en el mundo de la enseñanza y la formación religiosa y que no siempre disponen de obras de consulta serias entre la investigación especializada y la divulgación sin fundamento.0