Segunda novela protagonizada por el inspector Santiago Escalona, un policía barcelonés asignado al barrio del Raval y de cuya mano asistiremos al trasiego cotidiano en ese rincón populoso del centro de la ciudad. Se trata de un barrio lleno de tipos de dudosa catadura pero que ejerce sobre el inspector una fascinación extraña, quizás la fascinación de la vida ciudadana en su estado más salvaje.