Argumento de Luces de Bohemia
Colección: Colección de Teatro, n.º 84.
Luces de Bohemia narra las últimas horas de vida de Max Estrella, en la década de 1920. Escritor ciego, bohemio, de éxito intermitente, pasea su precaria situación económica por las calles madrileñas. Lo acompaña en su funesto desfile final el sinvergüenza Don Latino de Hispalis que, a modo de lazarillo, protagoniza junto a él una serie de diálogos y de situaciones donde queda plasmada la mediocridad de la España de la Restauración, que ahoga el genio y se decanta por la vulgaridad de una forma grotesca. A través de los célebres espejos deformantes, Valle-Inclán aglutina una serie de críticas que focaliza en las caducas calles de ese Madrid absurdo, brillante y hambriento. Para ello, utiliza un amplio abanico de personajes que representan a las distintas clases sociales, desde la burguesía con su Ministro de la Gobernación, a los trabajadores de la clase media, a los periodistas, a los escritores modernistas o los presos políticos, llegando hasta los estratos más bajos, con sus tabernas y prostitutas.
Cada personaje nos muestra la realidad de su condición y de su momento histórico. Las clases altas, podridas de corrupción, asfixian a un proletariado perdido en su propia miseria, que a veces quiere despertar, pero que al final volverá a caer en ese letargo cíclico al que el putrefacto sistema de sobornos lo condena.
Dentro de este contexto Valle-Inclán utiliza el tema de la muerte como algo recurrente durante toda la obra. Ya desde el principio, Max Estrella habla de suicidio con su esposa y con su hija como vía de escape a su triste situación económica. A partir de ese momento, la sombra de la muerte acompaña al protagonista por su periplo. Una muerte que esperará a Max en la puerta de su casa, en forma de frío desgarrador, de la que sacará provecho Don Latino de Hispalis, muestra de lo peor del alma hispana.0