Inducido por su amigo Roberto y por Elisa, Ernesto entró a formar parte del Privé del club «La Orquídea Roja», un club de temática sexual con influencias políticas en la sombra, en el que se entraba con la condición de explicar en público un suceso comprometedor de la vida personal de cada uno. De esa manera todos los socios dependen de la discreción del grupo y están vinculados a la organización.