«¿Acaso Simon Tanner no vagabundea, nadando en la felicidad, para no producir nada, a no ser el goce del lector?»
Franz Kafka.
De 1905 a 1913 el escritor suizo Robert Walser vive en Berlín, donde el poeta Christian Morgenstern lee Los hermanos Tanner , su primera y más celebrada novela, que recomienda al editor Bruno Cassirer: «Este hombre hablará así mientras viva y sus libros serán un extraño y fascinante espejo de la vida». Como todas las obras de Walser ésta entusiasma a críticos y escritores, pues, al igual que El ayudante y Jakob von Gunten , sus otras dos grandes novelas, retrata con excepcional intensidad el perfil errante de su autor, uno de los novelistas que más influencia ha ejercido sobre tres generaciones de escritores alemanes.