No es fácil celebrar hoy el Adviento. ¿Cómo desear, pedir o esperar la venida de Dios en medio de una sociedad donde, al parecer, Dios ya no interesa? Más que hablar de un Dios que viene (adveniens), ¿no deberíamos reflexionar sobre un Dios que se aleja, se oculta y se hace cada vez más extraño? El principal objetivo de estos materiales, elaborados en unas comunidades rurales de Cantabria, es ayudar a volver al Evangelio. El Espíritu de Jesús sigue vivo, actuando en el corazón de las personas por diferentes caminos. Incluso a través de estos sencillos materiales.