Con la publicación de esta obra, la Editorial Herder espera prestar un servicio positivo a la reflexión teológica de los lectores de habla castellana, que encontrarán en ella un cierto contrapeso a los estudios teológicos excesivamente abstractos o positivistas, por una parte, y sobre todo a los malabarismos superficiales de la literatura esotérica (magia, gnosis, astrología, horóscopos) hoy tan de moda, por la otra. El cristiano adulto debe, como ya recomendaba san Pablo a sus discípulos, «examinarlo todo y quedarse con lo bueno» (1Tes 5,21).