La litigación se desarrolla de la mano de profesionales dedicados, que innovan y crean a partir de sus particulares realidades como acusadores, defensores o juzgadores. De ese trabajo, depende el éxito del sistema y, en ese espíritu, está escrito este libro, que pretende estar igualmente entre la teoría y la práctica, para la formación de abogados que sostengan con persuasión y convicción sus argumentos, defendiendo de manera profesional, leal y honesta sus posiciones ante los tribunales penales.