Argumento de Literatura y Vida Cotidiana. Ficción e Imaginario en las Américas
La idea de que la literatura es un «ensayo» de la vida cotidiana, e incluso una forma de previsión o proyecto de futuro, no la defienden hoy día sólo personajes de novela. Las ficciones no ensayan una realidad que luego se concreta lo más fielmente posible, no son el original que se copia en la esfera de lo real, sino un trabajo de investigación sobre lo posible, una manera de explorar, y a veces de mostrar, cómo lo cotidiano puede ser diferente, «otro» y preferiblemente mejor. Así es como la ficción literaria, cinemato-gráfica o poética puede llegar a incidir activamente en la esfera de lo vivido, y tener una importancia crítica en los acontecimientos. En realidad, casi podríamos decir que la ficción es inactiva sólo cuando no circula ni es conocida, como bien saben los que practican la censura. Los dos capítulos que componen este volumen convergen en la relación que establecen entre la metaforización de la distancia crítica y los genocidios que tan tristemente caracterizan la modernidad. No quieren, sin embargo, sugerir que haya una relación causal entre distancia metafórica y genocidios, y aún menos entre la distancia crítica de la lectura y cierto tipo de violencia. Se trata más bien de revisar la idea de que lo que llamamos lectura crítica es una expresión del progreso del humanismo. Partiendo del Quijote y concentrándose en textos de autores sudamericanos (R. Bolaño, A. Dorfman, R. Piglia, M. Vargas Llosa, P. Melville) que ponen de relieve la actualidad de los procesos de lectura respecto a los sucesos y polémicas de sus respectivos países, es posible reconocer una alternativa al registro de la distancia en el registro del destino. Sería ilusorio pensar que basta reemplazar un registro por otro para acabar con todo acto de violencia, pero sí podemos esperar que, en la medida en que se articula en función de la alteridad propia y ajena (del otro en sí mismo y de los otros seres con quienes se entrama lo social), reflexionar en los lazos sociales a partir del registro del destino puede ayudar a erradicar del imaginario el tipo de violencia que surge de la negación de la existencia de los demás.0