Una novela original, sorprendente y llena de humor que pone de manifiesto una realidad de la sociedad actual de forma corrosiva y sin pelos en la lengua.
He dormido más de 1.000 horas, he visto 72 películas, me he pasado 500 horas ante el televisor, he leído 34 libros, me he preguntado 272 veces qué iba a hacer con mi vida, me he masturbado durante 20 horas... En definitiva, no he perdido el tiempo.
Trasto, a sus veinticinco años, es un bala perdida que no tiene la menor intención de cambiar. Sin proyectos a la vista, ni grandes ilusiones, decide refugiarse en su propia apatía en el piso de una compañera de facultad.
Cuando la necesidad de conseguir un sustento le obliga a salir a la calle -a las inhóspitas calles del París más cosmopolita- y buscar un trabajo, las peripecias se suceden sin tregua. Porque Trasto, aunque sabe que no puede vivir sin pasta, tiene claro que no quiere renunciar a su libertad.
Reseñas:
«Por fin todos los recién licenciados que naufragan cada año en la ribera del desempleo como un banco de peces enloquecidos han encontrado su portavoz. En esta primera novela, Romain Monnery describe su estilo de vida de forma amena y mordaz.»
Le Monde
«El retrato de toda una generación que rechaza el mundo del trabajo a fuerza de haber sido rechazada por él. Una novela que canta las bondades de esta vida sin un empleo pero con mucha lectura, música y masturbación.»
Les inrockuptibles
«Con un estilo verdadero y un agudo sentido de la observación, Monnery tiene asegurado el triunfo entre los jóvenes.»
Le Parisien
«Un elogio de la ociosidad tan emotivo como divertido.»
Lyon capital
«El autor conduce su novela con una pluma feroz y divertida, desengañada pero sin cinismo.»
7 Hebdo