De repente lo sobrenatural empezó a gobernar su vida
Cuando su hermano David le envió desde Praga un críptico y preocupante correo electrónico pidiéndole ayuda, Elizabeth Martin comenzó una búsqueda por medio mundo para salvarlo y evitar que se volviera loco. Josef Darecky era un dhampir, el hijo de un vampiro y una humana. Era extraño y misterioso y despertaba en Elizabeth deseos que podrían poner en peligro su misión, pero se trataba del único hombre que podía ayudarla a salvar a su hermano, que ya había comenzado a convertirse en vampiro. Comenzó así a crearse una conexión especial entre ellos, y Elizabeth se dio cuenta de que sólo vencerían a los vampiros cuando confiara plenamente en él y, al mismo tiempo, se ganara su confianza.