Kin-Fo, es acusado por su amigo Wang de no saber apreciar su felicidad y su fortuna, por no haber tenido ningún problema en su vida. Cuando Kin-Fo recibe la noticia de la pérdida de su fortuna, decide contratar una póliza de seguro de vida y planea cometer suicidio. Pero no se atreve a poner fin a su vida, y contrata a Wang para hacerlo, incluso dándole una carta que lo exonera de la culpabilidad de su muerte. Entonces Wang desaparece. Tiempo despúes Kin-Fo se entera de que su fortuna no se ha perdido y viaja por China tratando de evitar ser asesinado.