Hay que entender que hay muchos símbolos rúnicos más allá de las runas alfabéticas, que eran representaciones, simbolismos o arquetipos de muchas cosas, incluidas las de conocimiento profundo, esotérico y religioso. Además sabemos que las runas fueron utilizadas mas allá de un sistema de escritura, aunque vemos que con el tiempo fueron perdiendo su presencia en favor del alfabeto latino.
Las runas Armanen tienen una herencia puramente esotérica sin duda alguna. Se descubrió que sus 18 runas estaban cifradas en los conjuros del poema «Rúnatal» de la Edda Poética, donde se citan 18 conjuros rúnicos en formas ocultas, en los que residen formulas invocatorias que eran reveladas a nosotros por Odín. El poema preserva el secreto skáldico, pero revela lo suficiente para ser descifrado. Vemos que en los conjuros del canto éddico del Rúnatal residen las 18 runas Armanen. Las 16 primeras runas, tienen su origen en el Futhark joven, mas las dos runas herméticas (EH y GIBOR). Dos runas asociadas al misterio y origen del cosmos. Al contener esta sabiduría gnóstica, se cree que por ello tenían este carácter hermético.
El Futhork Armanen es un sistema muy trabajado a nivel esotérico, que contiene la sabiduría gnóstica de la runología, y nos ofrece respuestas espirituales y de trabajo de magia y meditación rúnica.