El ensayo de Sonia Lasierra propone un espacio de encuentro entre la palabra poética y el deseo ampliamente entendido, esto es, vinculado al cuerpo y próximo a la noción de sujeto. Ambas dimensiones son abordadas, principalmente, desde las perspectivas que procuran las teorías o miradas feministas, en plural. Estas últimas posibilitan una lectura abierta a interpretaciones a menudo inadvertidas por los hábitos críticos más tradicionales, y, de esta manera, nos enriquecen, nos invitan a transformar ciertas lógicas e inercias.
En momentos como los actuales, en los que el eros, como impulso hacia el otro y hacia la superación de los límites propios, parece resentirse, resulta más que interesante rescatar algo de su tensión y adentrarse en su carácter complejo y, a menudo, contradictorio. Para ello, la primera parte de este trabajo plantea una revisión de algunas de las versiones más extendidas que se han dado del deseo en Occidente. Con ellas se contrastan otras aportaciones teóricas alternativas que se despliegan en líneas muy distintas a la tradición hegemónica.
Tras el trayecto por distintas concepciones del deseo, la segunda parte de este estudio sugiere un recorrido de lectura por las rutas de las escrituras de Chantal Maillard y Miriam Reyes. Si bien sus aportaciones al panorama literario son de signo muy distinto, en ambos casos son manifiestas. Sin perder de vista un contexto poético amplio, este libro apuesta por mirar con cuidado y reposadamente mundos creativos singulares, arriesgados e intensos que apuntan a lo universal, como son los textos de las poetas mencionadas.
La lectura feminista nómada que se ofrece pretende un acercamiento temático a sus obras centrado en el deseo, también nómada, poliédrico, siempre cambiante, diferente en cada autora, y en cada poema, sabedor de las contradicciones y fisuras que atraviesan a los sujetos (poéticos) femeninos. Y más, en las contribuciones de estas poetas a la re-escritura del eros van re-creándose nuevas expresiones de la capacidad deseante de las mujeres, y, con ellas, nuevas formas de pensar las relaciones, la pluralidad de estilos de vida, nuevas maneras de habitar el mundo que a todos nos conciernen.