Argumento de Las Flores de la Tumba y Otros Relatos
El corazón no es solo la vida palpitante que late dentro de nuestro pecho. También es el receptáculo de todas nuestras emociones, deseos, tristezas y alegrías. No está condicionado a los estereotipos marcados por nuestra civilización, porque no envejece: muy adentro de nuestro pecho, seguimos siendo eternamente jóvenes sin perder las esperanzas y los anhelos, que, a fin de cuentas, son el motor que marca nuestra existencia. Siempre esperamos ser amados, ricos o vengados, porque el paso del tiempo no afecta a nuestros deseos más recónditos, y entonces nos preguntamos ¿por qué hice esto o aquello? ¿Qué me llevó a equivocarme, a abandonar a quienes amé? ¿A actuar de forma repentina e incomprensible? Es nuestro corazón, que guarda deseos, goces y resentimientos, y explota de forma a veces inesperada, derramando todo lo que guardaba dentro de sí. Nos cuesta entonces reconocernos a nosotros mismos.
Los textos que componen este volumen nos hablan sobre la suerte y el egoísmo, la soledad y el miedo, la locura y la pasión. Los seres humanos, criaturas complejas que no son felices con lo que tienen, encuentran su verdadera naturaleza cuando se enfrentan a la adversidad. A lo largo de las páginas de este libro encontraremos secretos, misterios, terrores y crímenes, fruto del oscuro interior del alma humana. ¿Hasta dónde podemos llegar cuando todo está en nuestra contra?1