Así, a una amplia colección de casi doscientas imágenes de cerca de sesenta teatros antiguos, desperdigados por tres continentes, precede una colección de estudios y textos que permitirán al lector formarse una cabal idea de lo que fue el teatro en la Antigüedad, de lo que supuso para la civilización occidental y, por fin, de cómo aún hoy sigue vivificando de manera potente las escenas y las pantallas de cine y televisión del mundo entero.