Ana se encuentra en las excavaciones del palacio de Cnosos, en Creta, como miembro de la expedición que dirige el profesor Durrell. Una noche, después de un seísmo, Ana decide comprobar los daños producidos en el palacio y luego informar al profesor, pero Durrell está muerto, la caja fuerte descerrajada y su interior vacío. Así comienza su última aventura.