?La Trinidad y un mundo entrelazado? constituye un serio intento de reflexión colectiva e interdisciplinar sobre las posibilidades, límites y fundamento de una «ontología relacional». Su fundamento es doble: los recientes descubrimientos de las ciencias físicas -especialmente el llamado «entrelazamiento cuántico»- que nos descubren la relacionalidad propia del universo, y las recientes tendencias teológicas del llamado ?nuevo trinitarismo?, que redescubren la relacionalidad amorosa propia de nuestro Dios trino y uno. La necesidad de una nueva ?ontología? surge en todo intento serio de desarrollar una ?creación evolutiva?, como los realizados en los volúmenes 1 y 3 de esta colección ?Teología y ciencias?. Porque con la ontología de Santo Tomás, basada en la sustancia y el ?hilemorfismo?, no es fácil explicar, por ejemplo, los sucesivos enriquecimientos filogenéticos de nuestro genoma. Y esa necesidad crece aun, si prolongamos la creación evolutiva, en una ?teología de la gracia y de la gloria? (¡tipos muy especiales de relación ?divino-humana?!). Dada la diversidad de coautores y horizontes interdisciplinares, este libro alude a concepciones muy diversas de «ontología relacional». Pero sugiere opciones mayoritariamente compartidas: considerar fundamentales tanto las relaciones como las entidades, centrarse en relacionalidad de tipo causal, explotar la semiótica ternaria de Peirce; expresar las analogías y disanalogías entre las relaciones divinas y las creadas, y atender a las divino-humanas. Creemos que es ese tipo de opciones que ha de guiar nuestra búsqueda ulterior.