La sutura y la piel es una invitación a trascender la superficie de las cosas en busca de un sentido. Propone un paseo y una mirada a escenas donde algo parece estar desmantelándose y reconstruyéndose, destejiéndose e hilándose, tachándose y reescribiéndose. La búsqueda es un trenzado que ata la reflexión y el abrazo, el silencio y la proclama, la niebla y el aliento.