Los autores destacan también las posibilidades de cambio y cómo las tecnologías y los recursos disponibles pueden contribuir a resolver muchos de los grandes problemas que hoy nos aquejan. Mediante el uso de fuentes renovables de energía, como la eólica, la economía energética podría reconvertirse del petróleo al hidrógeno. Los agricultores pobres podrían producir más alimentos utilizando servicios biológicos "gratuitos", como plantas que fijan el nitrógeno e insectos benéficos. Las mujeres podrían tener menos hijos si se les asegurase el acceso a la educación y poder tomar así sus propias decisiones sobre cuándo tener hijos.
La situación del Mundo 2002 detalla las prioridades de la Cumbre de Johannesburgo en siete áreas clave: agricultura, política energética y cambio climático, productos químicos, turismo internacional, crecimiento demográfico, conflictos generados por recursos y gobierno global. Las decisiones que hoy tomemos pueden marcar una diferencia en nuestros esfuerzos por construir un mundo más estable y seguro en el futuro.La situación del mundo es la publicación emblemática del respetado equipo interdisciplinario de investigación del Worldwatch Institute. Puede obtenerse información complementaria sobre las demás publicaciones del Worldwatch en la página web del Instituto