Las desigualdades y las inequidades en salud, en la mayoría de los casos, tienen su origen en las desigualdades sociales, de forma que las personas con menos recursos se enfrentan a mayores dificultades para acceder a los sistemas públicos de salud en condiciones de igualdad, y cuando acceden tienen una mayor probabilidad de acabar recibiendo una atención de menor calidad. Desde un enfoque principalmente cualitativo, este libro recoge la opinión de los profesionales de la salud, de los usuarios y de informantes clave, con el fin de analizar si ciertos colectivos como los inmigrantes irregulares, las personas sin techo o las personas mayores con muy pocos recursos pueden acceder y hacer un uso estándar de los sistemas de salud públicos al igual que el resto de los ciudadanos. Los resultados muestran que las personas con menos recursos (económicos, formativos, lingüísticos, relacionales,...) pueden encontrarse con importantes barreras de acceso a los servicios sanitarios públicos y recibir una atención sanitaria de menor calidad, y que esto estaría motivado por la escasez de recursos, los problemas organizativos y de (des)coordinación de los sistemas sanitarios, el rol de los profesionales y las características propias de los colectivos. Asimismo, este libro lleva a cabo un análisis pormenorizado y actualizado de la bibliografía científica y de los modelos de análisis que se vienen utilizando para estudiar las desigualdades, las inequidades, el acceso o la calidad de los sistemas de salud.