Las distintas reformas en el ordenamiento procesal, y, en particular, la ley 1564 de 2012 demarcan una nueva exigencia del modelo de juzgador que la realidad ofrece en la actualidad; sin duda es un problema empírico que debe ser abordado con el fin de las instituciones creadas con la operatividad esperada. El funcionamiento de la oralidad impone la necesidad de condiciones de efectivización para que la tutela jurídica efectiva logre sus cometidos a través de la institución procesal, tema que por demás resulta actual, de importancia manifiesta y de interés conceptual y pragmático. Esta obra es un acercamiento al sistema actual de la oralidad en el marco del Código General del Proceso, particularmente estudia las competencias y atribuciones conferidas al operador judicial, el nuevo rol de los sujetos procesales frente al proceso oral, la concepción de la prueba, el desarrollo de la oralidad en las áreas laboral, penal, administrativa.