Pierre Louÿs (1870-1925) sigue siendo para algunos un autor desconocido o un eterno secundario. Su perfil inconformista de artista excéntrico, su apología de la libertad sexual que emana tanto de sus ficciones como de sus escritos, le sitúan un tanto al margen de los circuitos de difusión literarios. A pesar del éxito de las adaptaciones cinematográficas de «La mujer y el pelele», el nombre del autor ha sido eclipsado por el de realizadores de la talla de Von Sternberg, Vadim o Buñuel, y sobre todo por el de las bellas actrices que han dado vida a su protagonista, Marlene Dietrich, Brigitte Bardot, Ángela Molina o Carole Bouquet. Por su ambientación en la España del XIX, «La mujer y el pelele», "novela española", parece más próxima al exotismo romántico de «Carmen» que a las búsquedas formales parnasianas. Sin embargo, una lectura atenta revelará la presencia de rasgos que la vinculan no sólo con el naturalismo, sino también con proyectos tan alejados del exotismo popular y costumbrista como pueden ser el decadente y el simbolista. La obra bucea en el abismo de la «naturaleza» misma de la pasión, adelantándose, con sombría lucidez, a las teorías del deseo que abrirán el siglo XX, e ilustra con intensidad el dramatismo de la llamada "guerra de los sexos", pero contribuye también a desenmascarar los mecanismos de un imaginario masculino capaz de generar arquetipos de tan probada eficacia como el de la «femme fatale».