La inexistencia de una regulación común para la liquidación de estas sociedades, unida a que en los últimos años estamos asistiendo a una reactivación del papel de la Junta General que busca dotar a este órgano de un mayor peso o significación mediante el incremento de la información disponible a los socios y la mejora de los mecanismos de control de la actuación del órgano de gestión, son razones que se suman a la hora de valorar el interés de esta monografía. En efecto, el papel de la Junta se ha visto reactivado sobre todo tras el debate surgido a raíz de la Sentencia Holzmüller en torno a las llamadas competencias implícitas de la Junta. Este hecho unido a la deficitaria regulación de la fase de liquidación y a la no siempre clara distribución de las competencias entre el órgano de gestión y la Junta General obligan al estudioso a hacer un esfuerzo de reconstrucción e interpretación que, partiendo de la consideración del régimen de funcionamiento de los órganos durante la vida activa, acomode esa disciplina a las singularidades y exigencias del proceso liquidatorio. La presente obra constituye, por ello, una aportación al mejor conocimiento de ese proceso cuya utilidad para nuestra praxis societaria es indudable.