Esta obra relata la historia de Orosia, princesa de Bohemia que a través del martirio que sufre a manos de los moros se convierte en patrona de Jaca. El obispo Arcisclo se presenta en la corte de Bohemai con el propósito de pedir la mano de Orosia para Fortún Garcés, príncipe de Aragón. El obispo narra la pérdida de España y como el islám se extiende por el país. La princesa acepta inspirada por un ángel pero es apresada por los musulmanes y pretendida por uno de sus oficiales. Al final de la pieza Orosia prefiere el martirio antes que someter a hombres de otra religión.