Ana Alcántara, chiquilla procedente de una familia adinerada de Cádiz, consigue todo lo que quiere de sus padres con su vitalidad, su alegría y su belleza, siendo terrible en los estudios y en el trato con aquellas personas fuera de su círculo.
Gerardo Bilbao, incipiente dentista afincado cerca de la vivienda de Ana, sufre los desplantes de la joven durante la colisión de sus vehículos, jurando una venganza próxima en la primera ocasión que tenga a la Srta. Alcántara disponible.
Tras un viaje a Estados Unidos junto a su padres, la joven Alcántara vuelve demasiado cambiada. La madurez, la serenidad y la elegancia han hecho de ella una señorita que nada hace recordar a la locura de su niñez.
Ana va a dar el pésame a Gerardo por el fallecimiento de su madre, y la chispa surge entre ellos.