Así arranca esta novela, la historia de alguien que deja su casa en busca de esa cosa brumosa que no siempre acertamos a explicar. ¿Un lugar en el mundo? ¿Aventura? ¿Simple distancia? El protagonista, al ver que su presente está perfectamente encauzado hacia una vida más o menos acomodada, decide dar un cambio brusco a las cosas y, contra la opinión de todos, acepta una oferta de empleo que lo llevará a las Islas Canarias. Allí conocerá a una mujer especial, una mujer desconcertante con la que no tardará en iniciar un romance, pero ya se sabe: Estas mujeres que nos parecen diferentes a las demás suelen ser las más peligrosas, las que nos cambian la vida y casi nunca para bien.
Estamos ante un libro que nos describe un viaje iniciático, de aprendizaje y delirio, de perdición y conocimiento. Tal vez, simplemente, no sea más que el intento de cartografiar el final de la juventud.