El Museo Sahariano de Beni Abes, el estudio de un fotógrafo de Bechar, la maga de Orán, las películas publicitarias, los maniquíes de escaparate, la televisión, los sueños eróticos de los peep-shows, todos los rostros y poderes maléficos de la imagen tentarán a Idriss en búsqueda de su alma fugitiva.
En La gota de oro Michel Tournier, uno de los mayores exponentes de la literatura francesa actual, reinscribe y da vida a los más antiguos mitos en el mundo moderno y recrea como novelista y poeta el juego fatal que enfrenta al hombre y al mundo.