Valeriano y Gustavo Adolfo Bécquer murieron muy jóvenes en 1870. Sus obras quedaron dispersas por los periódicos o inéditas en sus carteras de trabajo. Gracias a la diligencia de sus amigos se salvaron las obras del poeta y una parte de los dibujos del pintor. Lo que comenzó siendo un homenaje a los malogrados artistas se convirtió en el inicio de la poesía contemporánea en lengua española. Este libro, profusamente ilustrado, reconstruye minuciosamente lo acontecido partiendo de la Suscripción Bécquer que lo hizo posible. La ordenación y recepción de la obra del poeta y del pintor quedaron fuertemente condicionadas por esta circunstancia.