Este libro pretende no solamente historiar un período que abarca desde mediados de los años sesenta hasta hoy, sino también dar respuesta a un gran número de cuestiones de sumo interés: desde la evolución de las salas de cine y los cambios en la propiedad; los condicionantes económicos del sector; el retraso en la digitalización de las salas; las barreras que impiden un mayor consumo de cine o la composición de los públicos cinematográficos. Y sin olvidar además, la evolución experimentada por el mercado norteamericano y de la Unión Europea.