El Triple Crimen fue una emboscada. Forza, Ferrón y Bina creyeron ir a
concretar un negocio y terminaron en un zanjón de General Rodríguez. La
cadena de responsabilidades escala tan alto que desenmascaró el proceso
de adulteración de los medicamentos, la ruta de la efedrina y del
narcotráfico y hasta los aportes «non sanctos» para la campaña
presidencial de Cristina Fernández de Kirchner. Las autoridades se
vieron obligadas a tomar medidas que modificaran las políticas oficiales
de salud y varias figuras clave del gobierno están involucradas en la
causa.