La educación contemporánea afronta una crisis causada por un olvido de la función teórica y contemplativa de la inteligencia. El presente ensayo de Maritain reclama para el cultivo de la inteligencia el papel central que debe tener en la tarea educativa de la escuela, pero sin que ese énfasis suponga detrimento alguno de otras facetas del crecimiento humano que la educación debe igualmente catalizar y orientar.
La educación en la encrucijada es uno de los estudios de Antropología pedagógica más cabales que ha producido el pensamiento contemporáneo, un conjunto de reflexiones que pueden ayudar a que los educadores tomen conciencia de la envergadura, humana y humanística, de su tarea. Una oportuna reflexión en momentos de especial incertidumbre para la educación que, volcada en el suministro de competencias técnicas, parece olvidar su misión esencial: ayudar a la persona a crecer como persona.