José Antonio Guillén ha optado por abordar la cuestión problemática del acceso concreto al honor conectando el debate teórico en torno a la idea de nobleza con las prácticas administrativo-judiciales que proporcionaban hidalguías y hábitos de Órdenes Militares. De este modo, probanzas y averiguaciones son interpretados como tratados de nobleza, en tanto que expresan de forma positiva las ideas que aparecen en la literatura doctrinal y polémica centrada en elucidar la condición nobiliaria. Teoría y práctica muestran en las páginas escritas por Guillén Berrendero su relación estrecha. También su carácter conflictivo, pues si bien los mecanismos de ingreso en el honor daban respuesta al problema concreto de abrir o cerrar el círculo del privilegio, no es menos cierto que generaban tensiones, visibles en las quejas por las irregularidades procesales, las falsificaciones de testimonios y pruebas, la arbitrariedad de las sentencias e, incluso, la denuncia de los principios básicos que informaban el sistema del honor. Finalmente, cabe subrayar el periodo estudiado mediados del siglo XVI hasta la muerte de Felipe III y el ámbito geográfico-político tenido en cuenta las coronas de Castilla y Portugal, que permiten dibujar un panorama amplio y comparativo de ideas, comportamientos y marcos jurídico-administrativos a ambos lados de la raya, algo tan necesario como poco frecuente en la historiografía. Un buen estudio de historia social y cultural es el resultado.