«El enfant terrible de los intelectuales griegos... Su libro es una mina de provocaciones» (Lisa Röösli, 3sat Kulturzeit).
«Un vademécum en los tiempos de la eurocrisis» (Alf Mentzer, HR2 Libretto).
«Un panfleto poco ortodoxo, desesperado y útil» (Le Canard Enchainé).