No obstante, hay quien pretende evitar su construcción a cualquier precio, y sin la ayuda de su inteligrente amante, la cortesana Imperia, Bramante estaría perdido.
Pero La Cúpula del cielo también es la historia de su gran rival: el genial Miguel Ángel, que proyeta una basílica de San Pedro completamente nueva, con uan cúpula tan amplia como el firmamento, 1564 será para él un año decisivo: ha subestimado a sus enemigos